viernes, 13 de julio de 2007

El interior del IPC

Es evidente que la interventora, sus 3 ingresadores, los obsecuentes y oportunistas colaboradores internos y su poder coersivo pueden haber sido su suficientes para alcanzar los objetivos de ésta en un principio. Sin embargo para los objetivos de mediano y largo plazo que parecen plantearse, ya no alcanza con colaboradores no calificados. Sobre todo teniendo en cuenta que la situación de Intervención y la subversión de criterios meritorios se ha extendido por todo el Instituto y a pesar de esto, sigue siendo fundamental el trabajo sobre el IPC, y sigue siendo el encubrimiento de su manipulación el motor rector de las decisiones.

Aparte de varios afiliados a UPCN que empezaron a tener tareas fijas en las oficinas del IPC, fueron incorporados, como personal de confianza de la interventora, la economista Cecilia Piedrabuena y el informático Diego Cerezo, con sueldos superiores a los del personal histórico, a quienes se les impone la tarea de capacitarlos.

Ellos se suman a empleados de carrera cuyo comportamiento es definido, según distintas fuentes del sector, como colaboradores de Paglieri: Gustavo Benia, Patricia Davenia (Jefes de encuestadores) y Graciela Saks.

Entre las maniobras de encubrimiento, se destaca el proyecto de "cambio de base", "ajuste metodológico" o "nuevo IPC", liderado por Norberto Itzcovich, del cual no participan ninguno de los técnicos experimentados en la metodología del IPC. Por el contrario, este grupo fue formado principalmente por criterios de obsecuencia con la intervención y, justamente, Benia y Saks, forman parte de éste.

Por otro lado, para "ganar" adeptos en estas posiciones, no se duda en tomar represalias con las personas que se expresan críticamente con respecto a la Intervención: se desplazan trabajadores, se bajan salarios, no se respetan acuerdos previos sobre situaciones contractuales, se cancelan viajes, se maltrata.

Nos enteramos también que esta semana se está efectuando una redistribución del espacio en el tercer piso (el piso en el que se encuentran las oficinas del IPC). A partir de las mayores necesidades de espacio del IPC, se está desplazando de manera irrespestuosa a los trabajadores de otras direcciones que ocupan estos lugares. A las otras direcciones se les impone una nueva organización del espacio que empeora su condición laboral sin tener en cuenta sus propias necesidades, en otro gesto autoritario de esta Dirección a la que la situación ha superado ampliamente.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Cada mañana, al atravesar la entrada del Indec con una valla de entre 10 y 17 policìas de la federal, me hace mal.

Me recuerda los peores momentos de la Argentina.
Que desplacen compañeros que se niegan a ser cómplices de la mentira me produce un profundo dolor mezclado con asco y rabia.

Solamente me reconforta que desde el afuera del Indec, mucha gente esté tan enojada como yo con este procedimiento autoritario, burdo y digno de los peores representantes de las dictaduras padecidas en el pasado.

Mientras tanto, espero con confianza el día en que quienes se regodean con el poder temporal, sean juzgados y condenados.
TODO LLEGA.

Anónimo dijo...

Anonimo: hacia mas o menos 35 años que en la Argentina existian grupos comandos, para dilinquir planificando.
en Indec se ha ideado un grupo comando que uso todos los medios menos los legales para dilinquir. Al frente esta el "SR" Moreno con su barrita de gordos sueltos que seguramente los agrupo de algun penal.
Y bueno esto chicos se las saben todas... pero suelen morir jovenes.

Anónimo dijo...

El fiscal Garrido le volvio a pedir la renuncia a Moreno... y las demas medidas precautorias que harian que inguno de estos directores anomalos y de sospechosa actuacion terminen cartoneando por otro lugar.
OJALA EL JUEZ ESCUCHE A LA SOCIEDAD.